No des tu altavoz a los idiotas
Posted on Mon 26 May 2025 in Blog
En el fondo te entiendo.
Lo sé, crees que estás ayudando. La batalla cultural y todo eso. Pero alguien tiene que decírtelo: la estás cagando. Hay una razón para que la intolerancia y los extremismos estén creciendo desde la irrupción de las redes sociales: se benefician de nuestras reacciones naturales.
Hoy tus oídos se extienden hasta lo más recóndito del planeta. No tiene nada de extraordinario que escuches los comentarios más necios. Hace 30 años, los exabruptos de un obispo ultra, de un hooligan futbolero o de un senador senil por Alabama quedaban restringidos a un ámbito local. Hoy no, y en parte es culpa tuya. Al menos, a mi timeline llegaron a través de ti.
No sólo me llegan a mí, sino también a la gente a la que le molan esos exabruptos. Tanto el exabrupto en sí como tu indignación son su gasolina.
No seré yo quién corte las alas a tu libertad de expresión, pero quiero decirte algo: si te sigo en redes sociales es por que ya sé que tú eres mejor que ellos. No hace falta que des señas de tus virtudes morales cada cinco minutos. Tus enemigos no las aprecian y tus amigos no las necesitamos.
Lo peor, tal vez, es que ni siquiera tú estás quedando bien. Siento decírtelo, pero cada vez que me llega uno de tus retuits indignados, me doy cuenta de que has vuelto a picar. Y te pierdo un poquito el respeto.
Son ya muchos años cayendo en el mismo truco y empieza a resultar embarazoso.
No des tu altavoz a los idiotas. Eres mejor que eso.